Como se acerca el día del viaje, empiezo por contaros algo, de la historia de mi ciudad:
Tomar fue la ciudad de los Caballeros Templarios que después pasaron a ser los Caballeros de la Orden de Cristo en Portugal. Originalmente el rey Alfonso I cedió el castillo de Ceres en 1159 a la Orden del Temple; un año más tarde el gran maestre Gualdim Pais dio la orden de construir el castillo de Tomar. Después que la Orden del Temple fue suprimida, se fundó la Orden de Cristo en 1314. Esta nueva orden fue muy activa en las expediciones marítimas y como señal de tal presentaban la Cruz de Cristo en las velas de sus naves; la misma que adornaba las tres carabelas con que Cristóbal Colón llegó a las Américas.
Por toda la ciudad se puede ver símbolos templarios o de la Orden de Cristo en Tomar; inclusive el hotel mas emblemático se llama Hotel Dos Templarios. En el Convento de la Orden de Cristo, el cual es parte del Castillo de Tomar, habría que cerrar los ojos para no ver la presencia de los templarios. Por cierto la arquitectura de este convento se considera un excelente ejemplo de la que corresponde al período de su construcción y uso, del siglo XII al XVII; el convento ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por UNESCO.
Portugal es, probablemente, el único lugar de Europa donde los dispersos y maltrechos caballeros de la Orden del Temple lograron ponerse a salvo de sus perseguidores. Allí se camuflaron bajo la Orden de los Caballeros de Cristo y, a su vez, dejaron buena muestra de sus típicas edificaciones, castillos y fortalezas por todo el país luso.
Declarado Patrimonio de la Humanidad.
En el año 1160, Gualdim Pais, maestre provincial de la Orden de los Templarios, fundó el castillo de Tomar y empezó la construcción de la Charola, una iglesia-fortaleza de planta redonda con ocho columnas que, además, es la parte más antigua del Convento.
Después, dentro de las murallas del castillo, se sucedieron las obras hasta el siglo XVIII y aparecieron nuevas dependencias, entre las que destacan numerosos claustros y la Sala do Capítulo. Han pasado las centurias, pero este lugar sigue estando envuelto por un aura mágica y mística, que tiene como protagonistas a los legendarios caballeros Templarios.
Cro que xa che comentei que me encanta este tema referente ós templarios. A sú vida, obra e a cantidade de construccións que fixeron. Se ben tamén teñen fama de sanguinarios, tamén a teñen de misteriosos. Mira ti, ó final foron cair polas mans da propia igrexa.
ResponderEliminarPois nada, a pasalo ben e a ver se atopas un tesouro deses agochados...
¡Ah! ¡Cómo me gustan estos post! Más, más, por favor.
ResponderEliminar¡BSSS Ana!
Ya lo dicen, nunca te acostarás sin saber algo nuevo ;)
ResponderEliminarBesazos hermana.
¡¡Con lo que le gustan a uno que yo me se las historías de Templarios!!!! me lleva allí ¡¡FIJO!!!!.. conste que no me importaría nada ¿eh? lo que pasa que que éste ¡se pasa1.. si yo te contará la de recorridos que me ha hecho hacer....
ResponderEliminarUn besote (ya no queda nada para el Puente...)
¡Què guay! Me gusta un montón ese tema de los Templarios. Me he leído varios libros este último años sobre ellos.
ResponderEliminarXa te poden nombrar embaixadora de Tomar,debe ser precioso.
ResponderEliminarbicos
Bonita entrada.
ResponderEliminarAna, disculpa mis escasas visitas... y ahora que entro y veo lo bonito que has puesto el blog!!!
ResponderEliminarEnhorabuena! buen trabajo! :)
Tambien por lo bien hecha y documentada que está esta entrada.
Biquiños :)
Me apasionan estas historias!! En la universidad tuve un profesor que le gustaba investigar estas historias y nos contaba muchas cosas....Los templarios tienen algo que atraen, me encanta leerlas.
ResponderEliminarGracias por compartirlo.
Un besote y ya no queda nada para el puente!!